La quema de muñecos platense
Mucho antes de venir a vivir a La Plata , visitando a mis tíos que siempre fueron de acá, fui testigo por primera vez de esta costumbre. Sería más o menos 1971, yo estaba en primer grado y , la verdad , debo confesar que todos los vecinos que prendieron fuego un muñeco hecho con un jean y una camisa rellenos con paja, me parecieron unos salvajes .
Después , por esas cosas de la vida , me mudé también yo a esta ciudad y me hice platense por adopción y adopté la costumbre ( hasta me empezó a gustar la movida) de salir a recorrer la ciudad para ver la mayoría de muñecos posibles.
A lo largo de los años los muñecos también se transformaron en testigos de las diferentes épocas por las que pasamos .
Hubo un momento en el que reflejaron la fiesta mentirosa que vivía el país del "todo por dos pesos" . Llegué a ver por aquel entonces a "La bella y la bestia" con todo el cuerpo de la bestia recubierta de piel sintética (!!) y la pareja danzando sobre una base móvil que giraba con un motor. O un Tiranosaurus Rex , que superaba , seguramente , el tamaño que tuvieron esos bichos en la prehistoria , asomando parte de su cuerpo por el portal de Jurassic Park , todo montado en un gran operativo con una grúa . Eran tiempos locos donde los muñecos estaban rellenos de cualquier cosa, de aerosoles vacíos para que exploten más y más fuerte y donde cuando el Momo ardía una ola de calor tipo bomba agente naranja avanzaba sobre la gente que corría en estampida al grito de ¡ohhhhhh!. No había vallas , ni medidas de seguridad y el hollín y las lenguas de fuego llegaban hasta los cables de luz, chamuscaban las copas de los árboles o ennegrecían las casas de los vecinos. Una verdadera barbarie deliciosa .
Después empezaron los certámenes y los grupos organizaron fiestas y shows de fuegos artificiales para convocar a la gente y te hacían esperar horas con toda esa gilada cuando lo que todo el mundo clamaba era que el maldito muñeco ardaaaaaaaa.
La cosa se desmadró cuando llegó la regulación y el premio en plata y el número asignado por la Muni para cada muñeco que la gente vota por wassap y el dron que te filma todo desde el aire y el montaje frente a la "escena" ( porque ya no tiene gracia que sea un solo muñeco, uno solito con su alma , ahora tienen que ser tooooodos los personajes de la película ...hasta llegaron a hacer los 101 dálmatas , ¡¡¡si!!! 101 perritos más los padres y Cruella y todo lo demás) para que la gente haga fila , bien proli , todos organizados por una cuerdita y de a uno se hagan la foto frente a la Sirenita o al Rey León y de paso dejen un manguito o se compren la remera del muñeco .
Qué querés que te diga, yo ando recorriendo las calles internas a ver si todavía me encuentro a un grupo de pibes, un grupo de rebeldes de esos que aún sostienen vivo el espíritu de la quema del muñeco, los que te frenan el auto con una soga para pedirte una moneda para comprar petardos o rompeportones o espantasuegras como quieras llamarlo , lo que sea , lo más barato , lo más ruidoso . Busco en las calles laterales el típico Momo, el de los iniciáticos con forma de paquete de cigarrillos o de caja de leche que dice "chau a la mala leche del año". Me cuesta te juro , hasta vi un muñeco que (ofensa, alta traición ) ostentaba un cartel que orgulloso decía "libre de pirotecnia". Un momo libre de pirotecnia es como un asado de veganos, déjenme de joder y me dan lástima los perritos ,si , pobrecitos, pero también me doy lástima yo cuando camino por la calle y piso mierda canina.
Tengo un recuerdo glorioso : un Batman pedorro que habían hecho los pibes del barrio , un año en el que llovió todos los días previos al 31 y no hubo nylon que pudiera protegerlo. Cuando lo empezaron a quemar , el Batman largó un humo blanco , como cuando quemás pasto recién cortado y a todos se nos pusieron los ojos rojos y nos pusimos a llorar y a toser y de pronto, majestuosamente , como sólo saben hacerlo los grandes , se le aflojaron las piernas, si al Batman , y cayó de rodillas frente a todos .
¡¡Eso si que es matar a un año !!!
Roxana D'Auro